Si no haces esto, tu puerta de seguridad está en peligro (y tú también)

Muy probablemente has atravesado por una infinidad de puertas de seguridad, blindadas, contra incendios y no te has dado cuenta. Hoy en día es factible producir puertas de seguridad con atractivos diseños, mirillas y louvers que, aunados a sus brillantes colores podrían hacerte creer que se trata de puertas convencionales.
En MMI sabemos que la seguridad que puede dar una puerta está inicialmente en su fabricación, y nuestro proceso de producción certificado por distintas organizaciones internacionales nos avala. Sin embargo, hay otros factores ajenos al fabricante de la puerta que inciden en la seguridad de la misma.
¿Te ha pasado alguna vez que has tenido dificultades al tratar de abrir una puerta, ya sea que la llave no gira bien o se traba y no gira nada? En este punto es necesario revisar a fondo la cerradura para evitar que llegue el día en que la puerta no se pueda abrir en lo absoluto y te quedes fuera. Tal vez quieras repararla tú mismo o pienses que se resolverá poniéndole aceite, pero al ser una cerradura especial, lo mejor es que la revise un profesional.
Es necesario realizar inspecciones periódicas a las puertas para asegurarnos que cumplen con su función sin problemas y que abren y cierran perfectamente, al mismo tiempo que podremos detectar pequeños fallos y de este modo estar en capacidad de repararlos cuanto antes, ya que de no hacerlo, podrían convertirse en problemas costosos de reparar o en ocasiones, irreparables.
En resumen, inspeccionar periódicamente el perfecto funcionamiento de las puertas garantizará nuestra inversión y sobretodo, nuestra propia seguridad y la de otros usuarios.